domingo, 15 de febrero de 2009

Tomas Moro y su Utopía


Tomas Moro y su Utopía

Leer Utopía, obra maestra del pensador y diplomático ingles, Tomas Moro, es una tarea poco sencilla de abordar. Entender porque Moro escribe Utopía, es entender tanto el contexto en el que fue escrito, como la influencia que tuvieron los autores clásicos que durante el Renacimiento, el Humanismo se propuso reivindicar.

Moro, un abogado que gozó a lo largo de su carrera política de mucho reconocimiento, obtuvo diversos puestos de autoridad tanto en el mandato de Enrique VII, como en el de Enrique VIII. Moro era un religioso ferviente, tuvo como gran amigo e indudable influencia, a Erasmo de Rótterdam y es recordado por la dedicación que tuvo en fomentar el estudio y la práctica de la vida honesta y moral.

Tal como lo indica el titulo de su obra, Moro describe una utopía; una realidad ilusoria e idílica que representa sin duda, un fin inalcanzable. Así como Moro, existen diversos pensadores que en estas mismas líneas, describen fórmulas o modelos utópicos. Philippe Raynaud y Stephane Rials en su diccionario sobre filosofía política, describen dos tipos de utopías; las primeras creadas con el objetivo de criticar directamente un sistema político y social, que se presentan como un modelo sistematizado de sociedad, y las segundas utopías de forma parcial que aunque también críticos de determinadas estructuras, se manifiestan de forma indirecta (Raynaud y Rials:837:2001). Utopia de Moro, cala dentro del primer tipo, al describir la organización política, social y cultural de una sociedad, que de forma aislada, se creó en función al bienestar colectivo, a la vida sana y moral, en desmedro de toda valorización o costumbre que trajese pobreza material o espiritual.

Rafale Hytoldeo, viajero helenista, quien describe lo visto y lo aprendido en Utopia, rechaza rotundamente la propiedad privada, y elogia las buenas leyes que en esta sociedad han logrado cultivar la inteligencia y amprar la libertad de los ciudadanos (Moro:86:). Moro critica la sociedad en la que vive a través de los diálogos de este viajero. Nos dice que no hay nada mas contrario a la dignidad del soberano que reinar un pueblo de mendigos (Moro:55). Recordemos que la sociedad en el que vivía Moro era todo menos equitativa. La pobreza es una fuerte crítica de Moro a las formas de gobierno que parecen beneficiarse de la debilidad de súbditos pobres (Moro:54). Tal es así que Moro da a entender que donde quiera que exista una alta valoración del dinero, reinará la injusticia, la enfermedad, y la desigualdad. Es así que se defiende el concepto del bien común, en tanto que todos trabajan para satisfacer de igual modo a todos los ciudadanos. Es así que todos los ciudadanos aprenden determinados oficios necesarios para la sobrevivencia de la comunidad. Sin embargo, el trabajo es sólo una parte de la vida de los pobladores de Utopía, si bien todos están obligados a cumplir con deberes específicos, no se trabaja mas allá de lo necesario. Es una sociedad, sin duda en búsqueda un tipo de equilibrio.

Ahora, si bien Moro propone un sistema económico que brinda igualdad de bienestar a los ciudadanos, él a su vez, propone un sistema político que a través de roles jerarquizados, se crea un orden. Es así, que la sociedad de Utopía se organiza a través de familias. Estas familias, son en realidad grandes grupos de alrededor de 30 personas, que anualmente eligen un ‘filarca’(encargado), quienes a su vez, eligen a un magistrado, quienes en una votación secreta, eligen a un príncipe, cuyos candidatos han si electos por la población en general. Algunos piensan que es un sistema patriarcal, otros lo relacionan a la democracia, pero muchos ven detrás de lo descrito por Moro, una jerarquía evidentemente monárquica. Tal es así, que la igualdad en cuanto a bienestar no se confunde con la igualdad en cuando a autoridad. Una sociedad requiere de líderes, requiere de justicia y leyes que aseguran el orden. Ahora bien, lo curioso es que para Moro, lo líderes no se eligen por su capacidad de transformar la sociedad. La sociedad utópica de Moro se crea en base de una colectividad que sabe bien lo quiere, que comparte un visión de progreso y bienestar.

Ahora bien, para entender esto, debemos explorar la moral en Utopía; es decir la interpretación (sin duda uniforme) que los ciudadanos de Utopía tienen del bien y el mal. Sin duda, Moro no describe una sociedad liderada y controlada por sacerdotes. Mas bien describe una sociedad sin necesidad de una organización que obligue a la sociedad seguir determinados parámetros morales. La religión, el sentido del bien, la moral, y la fe, parece ser algo innato; que nace en cada individuo y que es cultivado por el sistema en el que viven. Ahora bien, para entender a Moro y el sentido de la moral que él tenía, debemos recurrir al pensamiento de uno de sus más importantes influencias: Erasmo de Rótterdam.

Rótterdam, admirador de la antigüedad y recordado por su humanismo enteramente cristiano, tuvo un rol protagónico en la tarea de espiritualizar la fe cristiana (Dresden:130:1969). Rotterdam le adjudicaba poca importancia a la iglesia como institución, y mucho énfasis a la necesidad de limpiar la fe de los lujos exagerados de la iglesia, del trafico de indulgencias y de la ignorancia del clero (Dresden:131:1969). Según Dresden, Rotterdam era crítico de la iglesia, fomentaba una filosofía cristiana basada en la experiencia individual de la fe, pero nunca fue en este sentido separatista. Es así que Rotterdam se mantuvo alejado del protestantismo, optando en un momento de turbulencia, mantener la paz, desprenderse de todo tipo de discusión filosófica, con la creencia de que existe una fe pura, que va mas allá de los dogmas establecidas por una institución. Este desprecio por las cosas materiales y el compromiso con la paz, es lo que identifica a Moro con Rotterdam. Ambos creen a los hombres capaces de tener una moral sólida y compartida. Sin embargo, lo que queda claro en el texto de Moro es que son las leyes y las rutinas que se institucionalizan las que aseguran el buen desenvolvimiento de la sociedad. Es decir, se requiere en la práctica de un sistema que mantengan al hombre en buen camino. Para Moro, la valoración del oro y la plata no es nada más que una costumbre que se enseña. Es así que todo tipo de influencia o costumbre que desvíe el hombre del buen camino, simplemente, se deja de enseñar. El control, la disciplina y la moral compartida es la base para la sociedad idílica de Moro.

Sin duda Utopía es una síntesis de los que Tomas Moro imaginaba podría ser una sociedad capaz de escaparse de los vicios y abusos que imperaban en la Inglaterra del siglo XVI. Muchos han logrado identificar en su obra una clara la influencia de escritos también utópicos como La Republica de Platón y La Ciudad de Dios de San Agustin. En si, la obra se puede interpretar desde diversos ángulos, pero para fines de este breve articulo, recordemos la interesante combinación que Moro crea, entre la moral y la fe casi intrínsico en el hombre, y las instituciones y jerarquías creadas para no permitir el desvío del hombre en direcciones no deseadas.

Referencias

Dresden, Sem “Humanismo y Renacimiento”, Ediciones Gaudarrama S.A., Madrid, 1969

Moro, Tomas “Utopía” Editorial Epoca S.A, Mexico

Raynaud, Philippe & Rial, Stephane “Diccionario Akal de Filosofía Política”, Ediciones Akal S.A., Madrid 2001


Maria Paula Brito

3 comentarios:

Zimbon dijo...

Muy util este texto!

Necesitaba información sobre Utopía y me vino genial!

Mi agradecimiento a la autora!

Zimbon dijo...

Muchas gracias!

viagra online dijo...

Siempre me ha resultado muy gracioso este libro, no sé porqué.